
¿Qué pasaría si, además de celebrar, le regalas a tu equipo una pausa significativa?
Un espacio para cerrar el año con calma, celebrar lo logrado y sembrar lo que viene.
¿Qué podrían vivir en la experiencia?
Adaptamos cada experiencia según el tamaño y esencia de tu equipo, compartiendo lo más importante: conexión, calma y sentido.
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Ejercicios participativos que permiten identificar los avances alcanzados durante el año (tanto laborales como personales), reconociendo fotalezas, desafíos superados y apredizajes clave.
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Actividades simbólicas y visuales que invitan a definir como quieren sentirse, trabajar y avanzar en el nuevo ciclo.
Cada cierre es una oportunidad para redirigir la energía hacia lo que realmente importa.
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Dinámicas de reflexión que promueven la gratitud, el reconocimiento entre pares y el sentido de pertenencia.
Cuando un equipo se reconoce, se fortalece
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Conversaciones guiadas que generan conexión, empatía y alineación en torno a los logros, valores y propósito común.
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Momento para integrar lo vivido, agradecer el camino y reforzar compromiso con los próximos objetivos.
Cerrar con propósito para iniciar con dirección.

✴︎ Más que una fiesta de fin de año,
un cierre con propósito. ✴︎
No importa el tamaño de
tu equipo,
importa el impacto que quieras generar.
Cada experiencia se adapta a:
Número de participantes
Propósito del cierre
Tiempo disponible
Tú eliges el cómo. Nosotros nos encargamos de hacerlo posible.
